La Siembra del Bubango
Se siembra directamente sobre el suelo o arena. Cada golpe con 2 ó 3 semillas, lo más próximas entre sí (Se tapan con 3 ó 4 cms. de tierra o arena). Se usan unos 10 kgs. por Ha. Las plantas tardan una semana en asomar en tierra, y media en enarenado. Si se siembra en semillero se trasplanta cuando aparezcan 2 ó 3 hojas con “dedos”. En semillero conviene usar turba.
Aclareo: Cuando las plantas tienen 2 ó 3 hojas normales, comprobar que haya una única planta en cada golpe. Las más débiles se arrancan. A veces hay que repetir el procedimiento. En ese caso, las plantas se cortan por la base del tallo, no se arrancan.
Aporcado: Se realiza a las 2 ó 3 semanas del nacimiento. Se cubre con tierra o arena la parte inferior de la planta para aumentar el número de raíces. No se deben tapar las dos primeras hojitas que salieron.
Tutorado: Se colocan cables de polipropileno (invernadero) o varillas de madera o metal (exterior). Se deben colocar uno por planta y otro entre cada planta y la siguiente.
Destallado: Se eliminan los brotes tardíos o débiles.
Deshojado: No se realiza excepto que la planta sea muy densa o las hojas bajas estén muy estropeadas.
Se deben eliminar las flores cuando caen al suelo, al final de la floración.
También se deben eliminar los frutos deformes, enfermos, muy grandes o caídos.
Malas hierbas:
Productos fitosanitarios:
Diquat, Glifosato, (Imazamox), Paraquat.
Abonado o fertirrigación:
Lo importante es que el abono empleado (o la mezcla de abonos) contenga una cantidad de fósforo (P) que doble la de nitrógeno (N), y de potasio (K) dos veces y media la de nitrógeno. No es nada exigente en cuanto al tipo de abono. Sin embargo, conviene ir subsanando pequeñas necesidades de la planta echando quelatos, aminoácidos preventivos y curativos, ácidos húmicos y fúlvicos, correctores salinos... (Ver Agricultura ecológica).
Riego o fertirrigación:
Es muy exigente con la humedad. Hay que regar el día anterior a la siembra. Luego se dan riegos suaves desde que asoman las plantas o no regar (riego localizado) en las primeras 3 semanas. Cuando las plantas tienen 3 ó 4 hojas normales, se deja de regar durante un tiempo, para fortalecer las raíces. Cuando aparecen los frutos hay que regar más y más a menudo. Una semana antes de la recolección se aumenta todavía más el riego y su frecuencia hasta el final. El riego normal sería más o menos semanalmente, aunque depende del tipo de calabacín, suelo, clima... También la cantidad de agua a emplear depende de estos factores, siendo aproximadamente de 500.000-600.000 litros/Ha/temporada (riego localizado), de 1.500.000-2.000.000 de litros/Ha/temporada (cultivo hidropónico) y de 2.000.000-2.500.000 de litros/Ha/temporada (riego no localizado). En general se puede decir que cada planta consume entre medio litro y 4,5 litros de agua al día.
NOTA: Para bajar el pH del agua de riego o de la empleada para los caldos (cuando el producto empleado en la mezcla lo requiera) se emplean Ácidos (Ver Agricultura ecológica). Para subir el pH (alcalinizar) se emplea Cal apagada, Potasa cáustica o Bicarbonato sódico (Ver Agricultura ecológica).
Recolección:
El fruto se recolecta cuando no está aún maduro (entre mes y medio y 2 meses después de la floración). El peso del fruto en este momento es de 600-1250 grs. El brillo y la delgadez de la cáscara indican el momento propicio para la cosecha. Los frutos se cortan con tijeras dejando 1 ó 2 cms. de “rabito”. Es un fruto muy sensible, hay que tratarlo con cuidado. Una vez recolectado el Bubango se puede almacenar hasta 10 días a 8-10º C de temperatura y 90-95% de humedad. También se suelen tratar con ceras o aceites para evitar alteraciones, como la deshidratación.
Si no quiere que se ponga dura la corteza, cortelos y dejelos en el mismo sitio (en la tierra) hasta que los use o los venda. Esta es una técnica de los viejitos canarios para que se mantengan tiernos por larga temporada.
Se puede hacer 2 cosechas. Desde agosto, setiembre u octubre hasta febrero, marzo o abril dependiendo del cultivar; y desde diciembre o enero hasta junio.
Se debe podar el tallo para que no se deforme. Conviene que ramifique en al menos dos brazos. Ver Agricultura ecológica: Cera de abejas.
La temperatura para que germine no puede ser menor que 15º C, germinando perfectamente a 20-25º C. Durante el resto del cultivo, no debe ser inferior a 10º C ni superior a 30º C. Durante la floración no debe pasar de 30º C. No es muy exigente con la temperatura.
La humedad relativa debe regularse al 65-80 %, nunca menor ni mayor por periodos prolongados.
El riego debe ser abundante y frecuente. Necesita mucha humedad en el suelo, pero hay que tener cuidado con los encharcamientos, especialmente en suelos arcillosos. Se riega por goteo o exudación (riego localizado) y a manta o por surcos (riego no localizado).
Necesita mucha luz. Cuanta más luz le llegue, mejor será la cosecha.
Le gustan los suelos con buen drenaje, profundos y de textura franca. Es muy exigente con la cantidad de materia orgánica del suelo. Puede crecer en suelos de pH entre 5 y 7. En suelos con pH cercano al 7, conviene enarenarlos.
Polinización:
Necesaria en invernadero. Se deben emplear colmenas de abejas o abejorros. Se colocan 2 colmenas / Ha como mínimo (Ver Polinización).
El marco de plantación dependerá del tipo de Bubango, pero más o menos de 1 a 2 metros entre hileras, y de medio a 1 metro entre plantas vecinas.